Llenarse la cara de glitter, sombras y blush es divertido, limpiar las brochas de maquillaje… no tanto, pero es un paso indiscutible que tienes que sumar a tu rutina de belleza si quieres mantener una piel saludable.
Y no es por asustar a nadie, pero existen historias de terror relacionadas con este tema. Una muy mediática sucedió en 2016 cuando la modelo Anthea Page contó a Yahoo Beauty que contrajo una infección muy fuerte en el ojo después de un shooting, donde el maquillista usó brochas sucias.
«Si te estás maquillando o estás probando algún producto verifica que todo se haya limpiado correctamente, no importa si a esa persona no le parece importante o se burla de tus preocupaciones, es fundamental para tu salud», compartió la modelo.
Brocha por aquí y brocha por allá
En entrevista con Refinery29, la dermatóloga Fran E. Cook-Bolden señaló que cada vez que usamos brochas esparcimos suciedad, bacterias, e incluso partículas virales que van una y otra vez de la cara al maquillaje. Aghhhhh!
Las cerdas de las brochas de maquillaje –aunque son irresistiblemente suaves e inofensivas– anidan células muertas, polvo, aceite y partículas poco saludables para el rostro.
Aunque es normal que todos nuestros artículos de belleza tengan bacterias, igual que nuestro cuerpo y todo lo que está en contacto con el medio ambiente, cuando los niveles de suciedad son muy altos te arriesgas a contraer enfermedades en la piel, que van desde acné e irritación hasta infecciones graves que necesitas antibiótico.
Si ya estás con los pelos de punta, aquí te va la solución: las brochas de maquillaje se deben lavar mínimo una vez por semana.
Sí, UNA vez a la SEMANA, además de seguir otras recomendaciones para tener la paz mental de estar simplemente maquillándote y no poniéndote un blush de bacterias.
Cómo limpiar nuestras brochas de maquillaje
1.- Mantenlas en un lugar limpio
Si eres de las que guarda las brochas sin cubierta y junto a los delineadores, polvos, labiales, bloqueador y demás artículos que habitan en la bolsa del maquillaje ¡ten cuidado!
Los lugares oscuros y húmedos son el lugar perfecto para las bacterias. Si tu bolsa está sucia, de nada sirve lavarlas y regresarlas al foco de infección, procura tener tus brochas en una cosmetiquera distinta y en un lugar fresco.
2.-Tan fácil como usar agua y jabón
Jamie Coombes, maquillista de Dior, recomienda usar champú para niños con agua tibia para limpiar las brochas, también puedes usar jabón neutro.
Además, sugiere no presionar hacia abajo la cabeza de la brocha, porque puede romper las fibras de las cerdas.
3.-Masajea, no talles
Los productos de belleza son caros, no queremos que destruyas tus brochas por miedo a las bacterias.
Masajea las cerdas con tus dedos y gira la brocha sobre la palma de tu mano o una superficie limpia y con textura; enjuágala hasta que el agua salga completamente limpia, será una sensación muy satisfactoria el deshacerte del cochambre.
4.-No las guardes mojadas
Las puedes secar suavemente con una toalla completamente limpia y dejarlas un rato oreándose para no guardar rastro de humedad.
Al secarlas fíjate que las cerdas apunten hacia abajo, y que la base de la brocha esté siempre seca, si no puede oxidarse, o bien, pudrir el pegamento y arruinar la brocha.
5.-El toque final
No es necesario aplicar este paso, pero la maquillista y blogger de belleza, Jeeshan Umar, recomienda usar un peine de dientes finos (obviamente limpio) como paso final de la limpieza de brochas, esto evitará que las cerdas se enreden o se desprendan en tu cara mientras te maquillas.
Abajo puedes ver el video completo donde aplica este truquito.
Ahora que ya sabes cómo mantener tus brochas de maquillaje impolutas corre a lavarlas, tu carita pisiosa te lo va a agradecer.