Labioplastia, una operación íntima que divide opiniones

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labioplastia
Foto. Dmitry Bayer

El tamaño, color, la forma de nuestros labios es diferente dependiendo de cada mujer. Los hay gruesos, delgados, oscuros, rositas, sensibles, difíciles de complacer… Y no, no hablamos de esos donde colocamos el labial.

La vulva es una parte importante de nuestro cuerpo y, como de todo él, debemos sentir orgullo. Sin embargo, como es normal en este mundo, hay mujeres que no se sienten cómodas con la forma de sus labios. Y aunque sea una parte que por lo regular no se admira a simple vista, llega a incomodar al grado de querer modificarlos.

Como parte de nuestros órganos genitales, la vulva es rica en terminaciones nerviosas y cualquier contacto puede llegar a alterarla. Es por ello, que tenemos que ser responsables con las decisiones que tomamos sobre ella y una de estas puede ser la labioplastia.

Se trata de procedimiento estético llamado designer vagina, que se ha vuelto cada vez más común entre mujeres que no están conformes con su área de genitales externos y quieren hacerla lucir más acorde con un deseo de estética particular. Según la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética, ISAPS, (en su estudio más reciente elaborado en 2016), la labioplastia aumento un 45%. En el mundo se hicieron 138,033 de estas operaciones. Brasil (23,155), Estados Unidos (13,266) y Rusia (8,774) ocupan los primeros lugares en esta cirugía. En México, el número de labioplastias realizadas fue de 3,758.

¿Qué es la labioplastia?

Es una cirugía estética que construye, reconstruye, reduce el tamaño o modifica la forma de los labios vaginales. También se puede llamar ninfoplastía o linfectomía, es un proceso ambulatorio –o sea, que después de 24 horas se puede volver a casa– y su recuperación es de 5 a 10 días si se tienen los cuidados correctos.

A la llamada designer vagina recurren mujeres que sienten un exceso de tejido en sus labios interiores, por reasignación de género o por alguna molestia al tener relaciones sexuales. Sin embargo, hay quien se opone a esta cirugía porque refuerza un estereotipo de belleza que se ha impuesto y se promueve como «feo» o «malo», tener una vulva que no tenga labios pequeños. La diferencia entre ambas es que en la labioplastia, las mujeres deciden. 

Beneficios y Consecuencias

La labioplastia puede traer beneficios o consecuencias después de realizarla. Es por ello que quien recurra a ella debe estar segura de esta cirugía y buscar a los médicos indicados.

Beneficios

  • Puede ayudar a subir el autoestima y generar mayor seguridad en cuanto a los genitales.
  • Los labios pueden quedar estéticamente como siempre se desearon.
  • Experimentar más satisfacción sexual.

Consecuencias

  • Pérdida de la sensibilidad en la área genital.
  • Dolor y sangrado posterior a la cirugía.
  • Sangrados prolongados, infecciones, daños en los tejidos nerviosos.

Consejos para una mejor práctica

  • Estar completamente segura de que quieres realizar este procedimiento, de que es necesario y es una decisión personal (no te sientas obligada por tu pareja u otras personas. Nadie necesita una labioplastia como nadie necesita un aumento de senos).
  • Busca un médico especialista que tenga experiencia en este tipo de cirugías. Siempre debes verificar que esté acreditado para ello.
  • Ten los cuidados correspondientes después de la cirugía para que no existan complicaciones.

La labioplastia es una decisión muy, pero muy personal. La forma más fácil de evitar esta y otras cirugías estéticas es amar nuestro cuerpo tal y como es. Sentirnos orgullosas de las formas o tamaños que tienen, aunque estas «salgan» de un canon de belleza. Al final, es nuestra belleza particular.

 

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