Por si no te enteraste, el fin de semana pasado se llevó a cabo en Hamburgo, Alemania, la reunión anual del G20, un evento diplomático de cooperación y consulta en el que se reúnen los mandatarios de distintos países industrializados del mundo. Como siempre, hubo momentos memorables como la ninguneada que le dieron a Enrique Peña Nieto (no te preocupes, Trudeau bebé lo rescató) y la crestomatía de una escena de House of Cards realizada por Trump y Putin. Pero quien se llevó las palmas esta vez fue la anfitriona, Angela Merkel.
Entre caras y gestos, la canciller alemana fue la protagonista involuntaria de las imágenes más memorables de la reunión. Aquí una recopilación de dichos momentos y cómo puedes usarlos para triunfar en tu vida cotidiana.
Eyeroll letal
Ya sea que estés recibiendo una letanía por parte de un mansplainer (como Putin) o que te intercepten en la calle los excesivamente amables vendedores de cupcakes, el eyeroll es un movimiento fundamental de defensa personal que denota hartazgo, pero siendo políticamente correcto. Para llevarlo a cabo mueve tus ojos en forma circular de abajo hacia arriba. Acompaña con una mueca para un efecto aún más dramático.
Doble face palm
Todos conocemos el face palm, ese gesto de llevarse la mano a la cara cuando no podemos soportar más la frustración. Bueno, pues Merkel ahora lo patentó con efecto doble poniendo ambas manos sobre su cara, en lo que suponemos fue un momento de tolerancia cero. Y no la culpamos, estaba hablando con Trump.
Tú puedes utilizarlo cada vez que llegue el estado de cuenta de tu tarjeta de crédito o cuando tu mejor amigx te diga que cortó y regresó con su ex… por novena vez en tres meses.
Mirada al vacío
YA. NADA. TIENE, SENTIDO. Es lo que parece pensar nuestra querida Merkel al hacer esta expresión de desesperanza, la cual puedes replicar cuando la señora de tu puesto de quesadillas de confianza te diga que ya se le acabó el queso, pero que todavía le quedan de guisado.
Técnica Peek-a-boo
No es fácil ser mujer en un ambiente dominado por hombres, por eso doña Merkel siempre anda al tiro para que no la dejen fuera del chisme. Esta sigilosa técnica funciona perfecto para cuando quieres enterarte del chisme de la oficina o saber dónde se va a armar el after-office. Para lograrlo simplemente camina con toda naturalidad por detrás del grupito. Cuando menos se lo esperen, da la vuelta y métete en la plática como si nada.
Esperamos que estos valiosos consejos de Angela Merkel te ayuden a sobrellevar la vida con mayor elegancia protocolaria. O, cuando menos, con más humor.