Los hemos usado tanto tiempo que parece que siempre han estado ahí, pero crear un emoji es todo un proceso. Estos dibujitos surgieron en 2011 gracias a Apple y desde entonces se apoderaron de nuestros teclados, chats y de nuestras vidas en general: están en llaveros, cojines, platos e incluso en una película mala.
Algunos son más usados que otros. Por ejemplo, ya no nos imaginamos una sesión de sexting sin usar la famosa berenjena. Sin embargo, la diseñadora detrás del dibujo dice que nunca se imaginó su uso y da otros datos curiosos sobre la creación de estos útiles dibujos
La historia de una practicante
Angela Guzman, quien era solo una practicante cuando fue parte del proyecto, recordó en su blog el proceso de crear los emoji hace casi una década: «Mi primer emoji fue el anillo de compromiso, lo elegí porque tenía texturas, como el metal y una gema, que suponían un reto». Hacerlo le tomó un día entero.
Después de ese primer logro, su técnica se agilizó y pudo hacer hasta tres al día. Si te parece poco, ten en cuenta que crear emoticones es muy laborioso porque le dan mucha importancia a los detalles, basta mirarlos detenidamente para corroborarlo.
Crear emoji tiene resultados inesperados
Respecto al emoji que nos ha bombeardo en todas las apps de ligue y que ha servido como preámbulo para el envío de dickpicks deseadas y no deseadas, Guzman comenta que no fue su intención que se le diera ese uso.
Lo que sucedió es que para crear emojis hay algunas reglas: «Todas las frutas y vegetales forman parte de un mismo paquete. Eso significa que tenían que ocupar el mismo espacio. Para hacer que la berenjena encajara, la coloqué diagonalmente» Y ya, no hay nada dirty detrás de esa creación.
Angela reconoce que se ha popularizado con un uso que no anticipó, pero no es el único emoji que ha adquirido connotaciones sexuales: el durazno, el taco, las gotas salpicando, la lengua y las cerezas también se usan para implicaciones sexosas, como seguramente confirman tus conversaciones.
Sin embargo, la berenjena sigue llegando más allá: a las dickpicks también se les conoce como eggplant photos y si poner en el buscador de Instagram #eggplantfridays, una galería interminable de penes desfilará frente a tus ojos.
Su éxito ha sido tal que el emojibator, un vibrador con forma de berenjena, se vende con éxito desde hace tres años.
Pese a que la diseñadora no lo pensó, es fácil adivinar por qué surgió el fenómeno: después de todo, la diferencia entre comer y coger es una letra y en ambas actividades se usan los dedos y la lengua, como bien evoca nuestra querida berenjena.