Este 8 de marzo marchamos en contra de las violencias, opresiones y desigualdades que nos atraviesan. A través de imágenes, les contamos cómo fue la marcha del 8M en Ciudad de México.
Bailamos, cantamos, gritamos con rabia y nos abrazamos con ternura porque soñamos con un mundo en el que podamos ser y existir sin miedo y con libertad.
Marchamos convencidas de que que esta lucha es colectiva, una en donde nadie se quede fuera: mujeres cis, trans, racializadas, trabajadoras sexuales, personas con discapacidad, personas no binarias y todas aquellas que quieren ver un cambio profundo en nuestra sociedad.
¿Feminista o antipatriarcal? La transformación del movimiento
Pero también gozamos. El recorrido del Ángel de la Independencia al Zócalo de la Ciudad de México se llenó de cánticos y baile.
«¡No! ¡Que te dije que no! ¡Pendejo, no! Mi cuerpo es mío, yo decido, tengo autonomía. Yo soy mía. ¡Porque no! ¡Que te dije que no!»
«¡Ahora que estamos juntas! ¡Ahora que sí nos ven! ¡Abajo el patriarcado se va a caer, se va a caer! ¡Ahora que estamos todas! ¡Ahora que sí nos ven! ¡Arriba el feminismo que va a vencer, que va a vencer!»
Como en cada marcha del 8M en Ciudad de México, cientos de elementos de la policía estuvieron presentes. Brigada Marabunta, una organización no gubernamental que trabaja por la manifestación libre y pacífica, reportó hubo uso de granadas de gas lacrimógeno por parte de la fuerza policial.
Aunque vuelvan a poner vallas y policías, esta lucha no terminará hasta que los sistemas de opresión colapsen. No importa cuántas vallas pongan, ni cuántos policías manden, no nos vamos a callar. Nunca más silencio.