Desde que existe el tarot, su misticismo e iconografía han sido inspiración fundamental para espiritistas y artistas por igual. Por eso no es de extrañar que con los años el tarot no haya dejado de reinventarse desde nuevas miradas. Donde antes hubo conceptos rígidos o referentes binarios, ahora surgen propuestas que reivindican el género, la identidad y la comunidad desde nuevos horizontes. Uno de esos proyectos es el Tarot Afro Queer de Mima Cortez.
Mima es una ilustradora, diseñadora y activista venezolana que crea «desde lo queer y la rebeldía de las lágrimas». A través de su arte explora su propio camino, pero también las experiencias de otras personas racializadas queer y temas que le apasionan, como la moda sostenible y el cuidado del medio ambiente.
Entrevistamos a Mima Cortez para conocer un poco más sobre su proyecto Tarot Afro Queer, el cual combina creencias paganas de su natal Venezuela, el arte drag y la moda, para crear una perfecta mezcla de misticismo y fuerza en donde cabemos todxs.
Malvestida: ¿Cómo comenzaste a explorar el arte y la ilustración?
Mima: Desde niña, la imagen y las palabras han sido naturales para mí. La curiosidad que brillaba a través de mis ojos me hacía explorar a diario el espacio que habitaba, recordando detalles que hasta hoy conservan el color, el brillo y la forma de aquellos días.
Crecí en una familia con situaciones bastante complejas, entornos de violencias y abusos, sintiéndome sola y abandonada casi todo el tiempo. Fue ahí cuando el arte me salvó, porque me permitió drenar y plasmar lo que vivía y, que en aquel entonces, era incapaz de comunicar.
Como buena exploradora, me gusta viajar; voy siempre de adentro hacia afuera y en ese camino he necesitado del arte para materializar todo aquello que me atravesaba y marcaba el paso de mi existencia.
Estudio artes desde los 7 años. Comencé en el Ateneo de mi ciudad y terminé estudiando desde pintura, escultura, teatro, artes circenses, escritura, poesía, fotografía y cualquier cantidad de vertientes del arte y sus expresiones. La necesidad de sanar a través del arte me ha acompañado como la relación más estable de mi vida. He hecho arte para encontrarme en medio de la oscuridad que he habitado desde que recuerdo, y en cada trazo he podido encontrar calma, ver y sentir la luz, el amor y un futuro que sonríe en esperanza.
Para mí, el arte no es un producto, un objeto o un resultado, para mí es un camino que a diario me permite tener recompensas para ablandar las corazas que desde tan pequeña he tenido que cargar. El arte me ha salvado la vida tantas veces.
¿Qué te motivó a crear un Tarot Afro Queer?
Me movió la necesidad de tener nuevos discursos y propuestas desde lo afro. De niña crecí leyendo y viendo toda clase de historias alrededor de la magia, lo divino, la fe, la metafísica y lo esotérico. Eran temas que mi mamá hablaba, experimentaba y estudiaba; pero lo que consumía como entretenimiento, venía siempre con una connotación eurocentrista o de “América” para hablar de USA. En aquellas historias, todas las protagonistas eran no racializadas, nadie que se pareciera a mí.
Este pasado que hasta hoy me mueve, y la relación tan cercana con distintos rituales y creencias desde mi propio hogar, encendieron el fuego de las ganas de tener un propio discurso de magia y fe para nosotrxs, las personas racializadas en Venezuela.
El sincretismo que hizo evolucionar, para su propia conservación, las distintas prácticas de fe que existían entre esa gran población de personas que vinieron de África a Venezuela en el proceso de esclavitud trasatlántica, es el mismo proceso que nos ha mostrado rostros blancos, hegemónicos y fuera de nuestras realidades como símbolos de fe.
Las personas racializadas, poetas, negras, la comunidad LGBTIQA+ y todo aquel que se sienta fuera del molde, tenemos derecho a tener fe, a rezarle a nuestras raíces, a predecir el futuro desde nuestros rostros. De esas ganas de removerlo todo nace este Tarot Afro Queer.
¿Cuáles son las principales fuentes de inspiración para tu trabajo y en específico para el Tarot Afro Queer?
Me inspiré en las distintas deidades, ánimas, muertos y santos que habitan el universo del espiritismo y la magia en Venezuela: El Negro Primero, La India Rosa, el Cacique Guaicaipuro, la reina Marialionza.
Esta fe está relacionada directamente con las personas racializadas y pobres; es aquella a la que recurren las señoras blancas cuando dudan de la fidelidad del esposo, y la misma que puede, con un baño de buenas ramas, curar un corazón partido, o al menos eso dicen.
El drag, que simboliza para mí la disrupción en la norma estética, de lo bien visto, lo delicado, lo bonito. Esta cultura deja salir nuestro espíritu a través de lo que se usa y se moviliza.
El diseño de moda es un pilar también en este proyecto. Es imposible desligarse de ciertas perspectivas, y cuando tienes un abanico de herramientas y pasiones, cuando planeas algo tan poderoso como este tarot, todo termina conjugado de forma armónica e ideal. De ahí la preocupación por los detalles, la coherencia entre los outfits, los escenarios y los elementos.
¿Cómo asignas significados a las cartas en el Tarot Afro Queer?
Esta parte del proyecto se llama reinterpretación. Es lo que he usado para darle una perspectiva propia a todo ese estudio de las distintas cartas y su significado. Voy haciendo un viaje, saltando del pasado al presente en los significados de cada carta. Es un proceso lento pero honesto y sentido. Me hago preguntas como: ¿qué era un mago antes y qué es ahora? Eso me ayuda a conceptualizar la imagen y a definir el significado de cada carta.
¿Hay alguna carta del tarot que sea especialmente significativa para ti?
La muerte. Esta carta es para mí la más poderosa. La siento como un espejo de la vida, de mi vida, del renacer que incluso vivimos a diario en cada amanecer. Hace un poco más de 10 años tuve una hija que falleció a los 13 meses, y esta muerte me llevó a mí también, me sumergió en lugares de dolor que no sabía que existían. Me llevó a estar sola conmigo y mis pensamientos, a abandonarme y a encontrarme. Aquella muerte que también sentía mía me hizo renacer, para entenderme ahora como la persona que soy hoy.
¿Cómo es tu proceso creativo? ¿Tienes rituales o enfoques específicos que te ayudan a conectarte con los temas que estás representando?
Soy una persona de rituales. Creo que el poder de las pequeñas acciones positivas nos condiciona a un camino más amable de transitar. Por eso, antes de sentarme a crear, siempre hago una lectura, una práctica de yoga, un par de páginas de escritura intuitiva, prendo un incienso para que el humo transforme los bloqueos en ríos que fluyen. Y es en ese momento cuando la magia nace.
Desde que nació la idea de este tarot, he vivido un proceso creativo constante. Tengo un libro que se llama «La Biblia de los Símbolos», otros que hablan sobre qué significa cada carta hasta la historia en el arte del tarot. Todos mis procesos artísticos nacen de las palabras, algo que escribo, algo que leo. Luego, con esa información, puedo crear imágenes desde mi propio imaginario y luego explorar cómo esa imagen puede hacerse más poderosa o significativa.
Mentiría si digo que el proceso creativo no se trata de mí, pero es lo que siento lógico y honesto. De esa forma, he podido dar forma a la mitad de este proyecto que espero se convierta en una acción circular.
¿A qué retos te has enfrentado al abordar temas como el racismo y el género en tu arte?
El desafío más grande que enfrento es el miedo. Me da miedo perder la fuerza para seguir llevando mi mensaje. Vivo con el miedo de no tener tiempo o recursos para sostener todos estos proyectos. Siento miedo del odio en redes sociales, de las burlas, los prejuicios, de los discursos de odio y de las estructuras que vuelven violentas las discusiones que promueven el antirracismo y la decolonialidad en nuestra sociedad. Pero ese mismo miedo, cuando soy capaz de gestionarlo, se vuelve una fuerza sobrenatural e imparable.
No hay nada que detenga mis manos y mis movimientos para que esa obra pueda salir a la luz y abrir conversaciones y sentimientos incómodos pero necesarios.
Más allá de los desafíos internos, están los colectivos, aquellos a los que se enfrenta cualquier artista, queer y negra. Esos que nos siguen poniendo obstáculos cuando queremos hacer del arte y nuestros ideales el camino para alcanzar nuestros sueños. Por eso, no me detengo, porque para mí, un like es igual de importante que un millón. Si una persona reflexiona sobre sí misma, la sociedad o el sistema viendo lo que hago, eso significa que es una persona menos viviendo bajo la “normalidad” que se nos impone.
¿Cómo crees que tu obra contribuye a la conversación sobre la diversidad y la representación en el mundo del arte?
Contribuye sacudiendo creencias y desafiando la estética que se nos vende como ideal. Cuando vemos algo, en cualquier medio, que nos lleva a ir hacia adentro, eso que vimos marca un antes y un después.
Aunque no tengamos el conocimiento para poner en palabras lo que pensamos, ya existe una incomodidad y de ella habrá sin dudas una búsqueda, una crítica, una réplica para con ese mundo que nos ha dejado a las diversidades a un lado.
Esa chispa que enciende el fuego de los cuestionamientos es mi aporte al mundo desde mi arte. Quiero que las personas se pregunten por qué creen en lo que creen, por qué hacen lo que hacen.
¿Qué planes tienes a futuro para el proyecto del Tarot Afro Queer?
Mis metas a corto plazo con este tarot es terminarlo para inicios de abril. Luego, entraré en ese proceso de reproducción para poder socializarlo junto con el mensaje que le abandera. Quiero acercarme a más personas, abrir conversatorios, lecturas colectivas con el tarot afro queer, exposiciones donde pueda mostrar a gran escala algunas de las cartas.
Como siempre, dentro de mis proyectos siempre hay un fanzine. Esta sería la meta a largo plazo. Se construirá con historias alrededor de este tarot y sus experiencias al momento de usarlo como guía para la vida. Sueño con ver a mis amigues reunides en una fiesta de tarot donde el drag cobre fuerza, y la magia y el futuro brillen desde nuestras palabras, acciones y maneras de vivir la fe.
Puedes seguir el trabajo de Mima Cortez a través de su cuenta de Instagram, @mimacortez, y la de su proyecto de comunicación feminista, @todxspodemosser.