Lo que realmente debería importarnos sobre el drama entre Blac Chyna y Rob Kardashian

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A estas alturas probablemente habrás leído o escuchado algo sobre el dramón que se armó después de que Rob Kardashian explotara en contra de su ex, Black Chyna, publicando en redes sociales una sarta de comentarios despectivos sobre ella y fotografías íntimas en las que aparecía desnuda.

La gravedad del asunto fue tal que Instagram tuvo que borrar las imágenes publicadas por Rob y posteriormente desactivar su cuenta, lo que no impidió que el hermano de las Kardashian continuara con su rant, ahora desde Twitter. Pero no estamos aquí para hablar de los dimes y diretes de una relación ajena, sino sobre las implicaciones que puede tener exponer las fotografías privadas de alguien.

De vendetta personal a delito federal

El famoso revenge porn, o pornografía no consensuada, es un acto que afecta profundamente la vida de las víctimas –emocional y psicológicamente– y que puede llevarlas, en los escenarios más extremos, al suicidio, como fue el sonado caso del estudiante de Nueva Jersey, Tyler Clementi, quien se quitó la vida después de que su compañero de cuarto difundiera sin su autorización un video en el que aparecía teniendo intimidad con un chico.

Aunque legalmente aún es un tema complejo que se analiza caso por caso, la pornografía no consensuada tiene implicaciones cada vez más severas para quienes lo cometen. En Estados Unidos se considera un delito, y en California, donde sucedió el caso Chyna–Kardashian, se castiga con una sentencia de hasta seis meses en prisión y una multa de 1,000 dólares, por lo que es probable que todo el dilema entre el hermano del clan Kardashian y su ex continúe un buen rato, no sólo en las redes sociales, sino en la corte.

En México, en septiembre de 2016 se propuso una iniciativa para reformar el Código Penal Federal y castigar con seis a 12 meses de prisión, y hasta quinientos días de multa, a quien grabe, fotografíe o comparta la imagen de una persona parcial o totalmente desnuda sin su consentimiento.

“Comete el delito de hostigamiento sexual quien sin el consentimiento expreso por escrito de la persona afectada grabe, edite, modifique, difunda, revele o ceda a terceros imágenes o grabaciones sexuales parciales o totales, que hubiera obtenido con o sin permiso en lugar privado fuera del alcance de terceros, aun cuando el material hubiese sido producido por la persona afectada”.

¿Qué podemos hacer para detenerlo?

Algunas acciones que podemos llevar a cabo cuando sucedan este tipo de situaciones son:

1. No compartir
No ayudes a que las imágenes o video que violentan la privacidad de una persona se viralicen. Para muchxs puede ser difícil resistirse al morbo de verlo o incluso querer compartirlo con los amigxs de confianza, pero la difusión implica darle continuidad a un problema que puede estar afectando severamente a una persona. Recuerda que algún día podrías ser tú, un familiar o amigx cercanx.

2. No culpar a la víctima
“Le pasó por zorra/borracha/infiel/libertina”, son algunos de los comentarios que suelen surgir cuando este tipo de casos ocurren. “Si no quería que la gente la viera para qué se toma fotos desnuda”. Ese pensamiento es equiparable al de quien justifica una violación porque la mujer iba vestida “muy provocadora” o “andaba sola de noche”. Una víctima jamás tiene la culpa de lo que le pasa.

3. Reportar
Si sabes que un sitio o cuenta de red social está publicando fotografías privada de una persona, ayuda a reportar para que los administradores de las redes puedan tomar cartas en el asunto.

En caso de que la víctima seas tú, la activista Holly Jacob, fundadora de la organización Cyber Civil Rights Initiative, recomienda lo siguiente:

1. Pide ayuda
Cuéntaselo a alguien de confianza, ya que es vital que te sientas apoyadx en el proceso. Si lo consideras necesario asiste a una terapia con un especialista que te ayude a sobrepasar la situación.

2. Documenta todo
Por más difícil que sea enfrentarte una y otra vez a las imágenes que publicaron sin tu autorización, reúne toda la evidencia que puedas al respecto: capturas de pantalla, enlaces, videos, etc.

3. Considera iniciar un proceso criminal
Infórmate sobre las leyes de tu Estado y país y las formas en las que puedes defenderte a través de ellas. “Las víctimas pueden ayudar a fortalecer un caso, y la condena, haciendo énfasis en violaciones de leyes conexas, incluidas las destinadas a la pornografía infantil, el acoso, la extorsión y el derecho de autor”

4. Pide que eliminen el material
Una vez que estés asesorada por un equipo legal, pídele a la persona o sitio que haya violentado tu privacidad que retire el contenido.

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